jueves, 5 de marzo de 2009

Una de cuernos orientales Cap. 2

Después de bastante tiempo me he lanzado a escribirte el resto de mi historia, la dejé un poco en el aire con idea de continuarla pero por una cosa y por otra no me decidía a terminar de contarlo.

Como ya conté venía de serios problemas en mi relación desde hacia al menos 4 meses que yo principalmente achacaba a este nuevo hobby que tanto tiempo le absorvía. Y en una noche de fiesta había cometido el tremendo error de ser infiel. Para colmo resultó ser su profesora de danza oriental. Vamos todo un culebrón.

Todo se mantuvo durante unas semanas como en pausa, yo no veia a pensa sa mi novia que andaba siempre de bailes, galas, espectáculos, clases, talleres y quedadas con las amigas... Y cada vez que acudia a buscarla o recogerla de alguno de estos sitios me volvía a encontrar con esa angelical criatura (En forma de profesora). Una tarde, cansado ya de no saber nada de mi novia, decidí pasarme a recogerla de sus clases. Allí estaba yo sentado en el escalón de la sala de baile esperando como buen damnificado, pasado un rato tras el fin de la clase ella no habia salido aun, así que me levanté y decidí volver a casa, justo cuando alguien me cogía por el hombro.

- ¿Ya no te acuerdas de mi?

jarl, si. Era la profe.

- Tu amiga no ha venido hoy.
- Ahnm. Bueno en realidad es mi novia. Estooo, quiero aprovechar para disculparme, no he actuado contigo demasiado bien.
- No te preocupes, si estuviera en tu situación haría lo mismo.
- ¿Si? (Dije con cara de asombro)
- Claro... Ojo por ojo, tu sabes.

Por un momento desconecté del mundo y mientras seguia la conversación algo en mi interior se había quedado clavado en ese "ojo por ojo".

- Perdona, no he entendido eso del ojo por ojo.
- Ups, ¿Tomamos un café?, creo que tienes cosas importantes que saber.

Os ahorraré la conversación pues fueron muchas horas que incluso se prolongaron durante varios días. Resulta que mi querida novia llevaba 4 meses pegándomela con un percusionista de no se que grupo que las acompañaban normalmente a cualquier tipo de evento, de ahí que nuestra relación se hubiera enfriado y deteriorado desde mucho tiempo atrás... Vamos que fui un cornudo mucho tiempo ... Obviamente eso no me exculpa de haber sido igualmente infiel pero si que me ayudó bastante a digerirlo.

La relación con mi novia evidentemente finalizó al día siguiente y por suerte a día de hoy mantengo una hermosa relación con aquel angel salvador que me rescató de la oscuridad.