jueves, 9 de octubre de 2008

Como la vida misma

A veces asisto perplejo a situaciones como la siguiente ...

"¿Entonces hemos quedado aquí con xxxxxxx?. Pues tía, el otro día me acerqué a verla y no tiene ni zorra idea jeje, no sabe ni hacer un camello y no había casi nadie en el sitio en el que bailaba jaja"

... Minutos después ...

"Hola xxxxxxx, oye genial lo de ayer eh! quedó chulísimo! ¿Como era el movimiento ese que ...."

4 comentarios:

Sara Mor dijo...

Por desgracia, cosas como esta pasan en cualquier tema, no solo en danza.

Una cosa es que no le digas a alguien directamente "tu forma de bailar me parece una mierda", pero tampoco que vayas poniendo a parir a otras bailarinas a sus espaldas.

Saludos.

Anónimo dijo...

Se puede ser educada para no ofender a la otra persona, pero sin rozar la hipocresía. Tener a una persona falsa a tu lado es lo peor que te puede pasar. A mi me gusta que me digan las cosas a la cara, aunque sea para decirme que lo hago mal. Con trabajo, siempre podré mejor y superarme.
Muchas veces este tipo de comentarios pueden estar hechos desde la envídia, se tendría que ver si realmente la sala estaba tan vacía o si lo hacia tan mal... jejejeje.

Anónimo dijo...

¡Cuánta verdad! Esto lo he visto yo más de un millón de veces.

Me ha gustado mucho tu blog. La pena es que compitas en ficción como yo.

Cuando una cosa se pone de moda da mucho asquito.

Anónimo dijo...

hola!! he vivido en carne propia la critica a mis espaldas, cuando una amiga-profe le decia a la otra "alumna" (despues de elogiarme por haber bailado como solista)es tan dura para bailar, baila horrible, obvio q deje de ser alumna y amiga.
eso no se hace, hay q ser profesional.
besos desde argentina